Primero que nada, esta nota no está mal etiquetada. Puede que sea el encargado de probar las motos que ingresan a Motor1 Argentina, pero mi llegada a este espacio arrancó principalmente por los autos. A este capítulo lo llamaremos “full circle”, ya que el vehículo que ingresó al garage -y del que me haré cargo- conecta mi historia con el “blogcito”.
Previo a pasar de “este lado", fui (y sigo siendo) comentarista de Autoblog. Eso me llevó en 2012 a conocer a C.C. con motivo del lanzamiento de la Ford Ecosport II en el Teatro Vorterix, con el especial regreso a los escenarios de los Illya Kuryaki & The Valderramas. Asistí como parte de los “20 twitteros” invitados por el sitio, junto a otros individuos que también crucé años más tarde. De aquel evento todavía conservo el simple de "Ula Ula", que nos dieron de regalo, pero no conservo buenos recuerdos de aquella etapa de la dupla formada por Dante Spinetta y Emma Horvilleur.
Avanzando hacia 2019, Autoblog realizaba un Focus Group de la serie limitada de Citroën por el centenario de la marca, llamada "Origins". Haciendo uso de una “wild card”, conseguí mi acceso a dicho evento (ver nota) alzando una cédula en la mano correspondiente a un Mehari del año 1975, que hace diez años conservo en mi garage. Gracias a él (después podemos ponernos a discutir sobre las relaciones entre los vehículos y las personas) me he podido dar varios lujos, entre los cuales podría mencionar estar escribiendo este texto mientras me encuentro apreciando por la ventana al flamante Citroën C3 Aircross, en versión Shine Turbo200 AT de cinco asientos en bicolor Gris Artense con negro, que C.C. dejó en mis manos para que me acompañe durante una semana a cubrir algunas novedades y presentaciones del mundo de las motos (y por qué no, por ser posiblemente el miembro más “citronero” del staff de Motor1 Argentina).
Sentado desde mi humilde Mehari, no entiendo el estado actual de Citroën, alejada de ese estilo rupturista y chic que la hizo famosa, siento que su posición dentro del Grupo Stellantis es la de ser la marca de entrada, la “low-cost”, lejos de lo que nos acostumbraron históricamente con la marca del doble chevrón. Sin embargo, proyectos como la versión original de C4 Cactus o el Ami eléctrico, siguen mostrando dotes de esa originalidad y rupturismo, pero sin tanta “Haute Couture” (porque para eso existe DS dentro del grupo).
Este (¿o es esta?) C3 Aircross es el segundo vehículo que sale del proyecto “C-Cubed”, compartiendo la Plataforma CMP (Common Modular Platform) con el nuevo C3 convencional y el inminente Basalt (ver fotos). Es un vehículo completamente nuevo con respecto al viejo C3 Aircross, que era un derivado de la versión Picasso, más en un estilo MPV -pasando a convertirse en una SUV como demanda la tendencia del mercado- enfocándose más en ser el vehículo ideal para una familia numerosa, con una novedosa opción de siete asientos, equipamiento que la destaca y que es algo ya no tan visto en vehículos de marcas “generalistas”.
Debo admitir que, al verlo por fotos, y en un primer contacto visual en persona el pasado verano en el “Summer Car Show”, esta (¿o es este?) C3 Aircross no fue muy de mi agrado. ¿Podrá revertirse por completo esa primera impresión?
Tiene un precio de lista de 29.767.500 pesos y la crítica completa se publicará la semana que viene.
P.B.
Fotos: Juan Manuel Lopetegui
El Citroën C3 Aircross Shine Turbo 200 AT 5 Asientos tiene un precio de lista de 29.767.500 pesos.
Pero hay versiones entre 22.4 y 31.2 millones de pesos.
La crítica completa se publicará la semana que viene.