Texto de Paul “Coloflow” Szebesta
Piloto oficial de Motor1 y creador de Racing Films
Nota complementaria al video del Ranking de Motor1 (ver video abajo)

Cada tanto tengo la suerte de que C.C. no esté disponible para retirar y devolver los autos que nos prestan. Esta vez, me tocó tener en mi poder el nuevo DS 4 (leer crítica). Alguien en DS va a leer esto y me va a odiar, pero yo todo el tiempo me sentí arriba de un nuevo Peugeot 308. Es que como le debe pasar a muchos: tengo más afinidad con la marca del León -por autos que pasaron por mi familia, historia, etcétera- que con la marca con posicionamiento premium del Grupo Stellantis.
Este DS 4 es primo del nuevo 308 que se vende en Europa y que no veremos por nuestras tierras. Tiene lógica: pertenece a un segmento que viene perdiendo cada vez más terreno y, además, ¿a quién se le ocurriría pagar más de sesenta mil dólares por un auto generalista que hasta tuvo su versión nacional? Lo mismo pasa con otras marcas, que ven imposible traer sus modelos del Segmento B o Segmento C, debido a ser extrazona y que tendrían precios que muy pocos podrían y quisieran pagar.

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Distinto es si te posicionás como una marca premium (y con un producto que respalde ese posicionamiento). Eso es lo que pasa con el DS 4. Si bien es un hatchback del Segmento C, tiene una calidad y equipamiento que lo alejan bastante de los modelos que conocemos como "compactos generalistas". Y si encima le agregás un poco de despeje al suelo, pudiendo hacer esa ensalada entre SUV, Crossover y Hatchback que tanto le gusta al grueso de los consumidores hoy en día, el combo cierra por todos lados.

Como en todo DS, el apartado ‘diseño’ es el que se lleva todos los comentarios, y en ese sentido, este DS 4 me gusta mucho. Cómo fue resuelta toda la parte trasera del auto me encanta, no tanto como la trompa, que la veo un poco ancha para mi gusto y me hubiera gustado que fuese más redondeado en las puntas de los paragolpes. Perdón, tal vez sea que quiero ver el nuevo 308 en todos lados.

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Lo mismo pasa en el interior: todo está diseñado con las líneas que caracterizan a DS, y que en este caso queda muy bien. Digo "en este caso", porque el otro modelo que probé de la marca, la DS 7 Crossback (leer crítica) me pareció un tanto sobrecargada de rombos y triángulos desparramados por todo el habitáculo. En el DS 4 esto se encuentra mucho más refinado, en una clara declaración de guerra hacia sus competidores alemanes, pero en el afán de buscar diferenciarse del resto, se puede caer en lo poco práctico de algunas cosas.
Un ejemplo es la tercera pantalla que tenemos por delante de la selectora de cambios, la cual nos sirve para escribir de manera táctil alguna dirección para el navegador, o mover los iconos de la pantalla principal. El tema es que la pantalla principal también es táctil, por lo cual si quiero accionar algún comando voy directamente a esa que está a pocos centímetros de distancia.

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Insisto con que el interior es divino y de muy buena calidad, pero puede llevar un buen rato, acostumbrarse a dónde están ciertos botones o qué hacen. Consejo: estudiar muy bien el manual de usuario.
Dichas esas contras, el resto son puros halagos. Cuero por todos lados, el sistema de audio suena muy bien y con calidad, la pantalla es muy ágil y el aire acondicionado puede transformar el auto en una heladera fácilmente. Esto me vino genial para el agobiante calor que hizo en Buenos Aires mientras duró el préstamo. Pero la corto acá, si me pongo a describir todo el equipamiento de esta versión Trocadero, esto no sería una nota del Ranking Motor1.

Por último, lo que también es muy bueno es el confort de marcha. Sabemos que para la calle se disfruta mucho un auto así, pero en la pista no es lo ideal. Asi que, pasemos a lo que nos concierne. ¿Cómo le fue al DS 4 en el Circuito 6 del Gálvez?


Posición de manejo

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Excelente. Las butacas son de un generoso tamaño, haciendo que el cuerpo se mantenga contenido en toda situación. El volante forrado en cuero tiene un hermoso tacto, y esta vez no sufrí el inconveniente de otros autos del grupo Stellantis, donde en los pasos de curva tocaba involuntariamente algún botón, haciendo que se prenda la radio o pida que le dé alguna indicación. El tablero es digital, eso no me gusta, y si bien se pueden cambiar los diseños, ninguno termina de ser lo suficientemente claro, siempre poniendo adelante el bello diseño por sobre lo práctico.


Suspensión

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El DS 4 equipa sistema McPherson adelante y barra torsional atrás. Desde ya que al no ser un auto deportivo, este elemento está orientado en su totalidad hacia el confort. Como resultado tenemos que en la pista lo penaliza bastante, no tanto en los cabeceos que hace al frenar, donde mantiene la estabilidad, sino en los pasos de curva. Allí primero sufrimos el gran rolido de la carrocería, pero donde más se sufre es en las salidas de las curvas, donde al contar con buena potencia se levanta mucho la trompa y perdemos grip. Lo que tiene de bueno es que el tren trasero no va soldado al piso, esto nos deja hacer una rotación en los ingresos, de hecho, bastante mayor a la que me esperaba, pero ahí nomas nos corta la diversión el ESP. Lo malo de esta diversión ‘a medias’ es que en pleno tránsito de la curva, cuando la cola tiende a seguir de largo y esa inercia es cortada por el ESP, instantáneamente va de trompa. En las curvas de baja o media velocidad no pasa nada, pero eso también sucedió en Ascari, el curvón más rápido del Circuito 6 que transita a unos 150 km/h, y casi casi me voy afuera. Nos salvamos, pero estaría bueno que: o nos deje ir de cola durante toda la maniobra, o no lo permita en lo más mínimo. Esa indecisión se torna un poco peligrosa.


Frenos

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Buenos. En la primera vuelta los frenos se comportan de una manera lógica, frenando en distancias normales. Si bien el día de la prueba hacía muchísimo calor, ya en la segunda vuelta la merma de poder de frenado se hizo notoria, haciendo que ni siquiera intente seguir la vuelta porque no iba a lograr mejorar el tiempo ya hecho.


Dirección

Muy buena. Con asistencia eléctrica, filtra bastante lo que sucede en el tren delantero, y en busca de confort, es muy liviana.


Caja

Muy buena. Automática de 8 velocidades. Para los cambios ascendentes decidí no interferir y dejar que el auto los haga solos. En ese sentido tiene una buena velocidad para cambiar de marcha. En cuanto a los rebajes, los hace en velocidades normales para este tipo de vehículos. En cuanto a su relación, diría que es más bien larga, ya que llegue en quinta marcha al final de la recta.


Motor

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Excelente. En lo que a performance se refiere, este es el mejor elemento del auto. Se trata de un PureTech 1.6 turbo de 215 CV y 300 Nm. Realmente me sorprendo lo bien que patea de abajo. Luego, a medida que se gana velocidad esa conducta se tranquiliza, pero en las salidas de las curvas hace un excelente trabajo en recuperar velocidad en poco tiempo. A su vez, si bien va en contra del confort, el ruido que hace se filtra bastante en el habitáculo, dejando cierto margen al disfrute frente tanto refinamiento francés. Perdón, alemán.


Ayudas electrónicas

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Lo único que se puede desconectar es el control de tracción, que ni siquiera pude porque no sé si funcionaba mal la pantalla o estaba corriendo mal la perilla virtual, pero no pude. Como dije en el apartado de la suspensión, el ESP interfiere justo cuando la cosa se pone divertida. Si bien suelo renegar de este sistema en la mayoría de autos, tengo que admitir que esta vez me salvo. En la curva de ‘La Confitería’ deposité demasiada fe sobre los frenos, los cuales no pararon al auto en la distancia que yo pensé que lo podían hacer, y dando como resultado que entre un poco pasado. Gracias al ESP basto con darle unos grados más de volante para que el auto tome la trayectoria correcta y no la que mancuso tomó. Bien por el ESP, y gracias.


Neumáticos

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Muy buenos. El DS 4 equipa unos Bridgestone Dueler H/P Sport AS 225/55R18, los cuales no sufrieron un desgaste más allá del normal.


Comportamiento

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Bueno. Como todo auto que no está concebido para un uso en pista, no es justo juzgarlo como tal. En ese sentido, creo que el DS 4 hizo un buen papel. La potencia del PureTech es buena, nos impulsa con entusiasmo cuando pisamos a fondo y la caja acompaña de manera correcta lo que nos entrega el motor. El gran problema, como en todos los autos no deportivos, son las suspensiones. Al ser blandas y orientadas hacia el confort, no podemos aprovechar de manera correcta las buenas prestaciones de la mecánica. Si le sumamos la electrónica, que celosamente estará custodiando que el auto no barra la trompa, los tiempos se van para arriba. De todas maneras, yo creo que el tiempo que hizo está bastante lógico. Hubo más de uno en los comentarios que arriesgo puesto 23 o 24 del Ranking Motor1. Eso sería un tiempo de 2.17.000. Pensémoslo de esta forma: su pariente más cercano dentro de Ranking, el Peugeot 308 S GT tiene 225 cv y pesa, 1279 kg. Con esas cifras logró una velocidad final de 179,1 km/h (leer crítica). Este DS 4, con 1505 kg y 215 cv llegó a 178 km/h. Pero este DS 4 es más alto, más ancho y más largo. Si le sumamos el mayor despeje al suelo, las gomas con perfil más alto y el mayor peso, esos cuatro segundos de diferencia se hacen más que lógicos entre un modelo y otro.


Robustez

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Muy buena. Salvo por los frenos, los cuales se fatigaron en la segunda vuelta ayudados por la elevada temperatura del ambiente, el resto de elementos no sufrieron problemas.
Relación precio/deportividad: Claramente, si alguien busca deportividad en este modelo, está mirando el auto equivocado. En ese sentido, el precio por deportividad es malo. Ahora, quien busque un diseño que se diferencia del resto del parque automotor, sumado a un muy buen equipamiento y sobre todo, muchísima calidad de construcción, en el DS 4 encontrará una excelente opción para cumplir sus expectativas.


Conclusión

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Me gustó mucho el DS 4, en parte porque sé que es familiar del 308, pero sobre todo por la gran calidad de materiales que ofrece, toda la tecnología que equipa y lo mucho que se disfruta viajar en él. Como era de esperar, en la pista las cosas se iban a complicar por su orientación al confort, pero como nadie lo va a usar en un circuito, podemos decir con total seguridad que es un gran auto para el que pueda comprarlo.


Mediciones:

Tiempo de vuelta en el Circuito 6, 2:20.474. Velocidad máxima en recta, 178 km/h. Velocidad media, 109 km/h.


Producción: Coloflow (@PaulSzebesta_), RacingFilms, Hernando Pollicelli, Julián Podesta, Orly Cristófalo, Julian Gomez, Ciudad Autódromo y Motor1. 

Agradecimiento: Black's Indumentaria, Pinturerías Gastón, Cámara del Comercio Automotor, 3mc Designs.

Instagram: @RankingMotor1

Canal de YouTube: @RankingMotor1


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