Fiat siempre tuvo reflejos rápidos para detectar y adoptar las tendencias del mercado de autos. Al menos en la Argentina, fue pionera en ofrecer una respuesta ante la necesidad de movilidad pequeña y accesible. Lo hizo en los ’60 con el 600 y en los ’90 repitió la hazaña con los Uno y Palio. También percibió antes que nadie el furor por los vehículos con estética off-road, cuando todos querían (aunque pocos podían pagar) una 4x4: así nació la familia Adventure, que incluso se adelantó a la llegada de la exitosa Ford EcoSport.
Más cerca en el tiempo, la Fiat Toro picó en punta (junto con la Renault Duster Oroch) en el nuevo segmento que hoy se encuentra en plena ebullición: las pick-ups compactas. Y se adaptó mejor que nadie a un mercado automotor argentino lleno de restricciones y cepos como el actual, con el best-seller Cronos (ver otros motivos de su éxito).
Sin embargo, en el segmento de los crossovers y SUVs del Segmento B (chico), Fiat fue una de las últimas en reaccionar. Hoy todas las marcas tienen entre una y dos opciones en esta parte tan específica del mercado. Hasta el mes pasado, Fiat apenas había participado de manera tímida con el 500X (leer crítica): era un gran producto, pero al llegar importado de Europa pagaba demasiados impuestos e ingresaba con cupos restringidos (leer obituario).
El motivo de la tardanza en desembarcar en este segmento fue el Jeep Renegade. El entonces Grupo FCA (ahora fusionado con PSA para dar vida a Stellantis) decidió en su momento priorizar la imagen y experiencia de Jeep en el mundo de las SUVs antes de dejarle el turno a Fiat.
El cálculo estuvo bien hecho. El Jeep Renegade fue la SUV más vendida del año pasado en la Argentina (ver nota) y ahora por fin aparece Fiat con el flamante Pulse. Es un crossover basado en la plataforma del Argo que, a diferencia del Renegade, no tendrá opciones de tracción integral y propone un uso más urbano.
¿Podrá el Pulse recuperar el tiempo perdido?
Este producto llega a la Argentina en tres versiones (ver equipamiento y ficha técnica) y vamos a probar durante una semana la variante Impetus 1.0 Turbo CVT, con un precio de lista de 3.705.000 pesos.
La crítica completa se publicará la semana que viene.
C.C.

