Cualquier fanático de los autos sabe que los BMW que llevan la letra M son los modelos más deportivos, desarrollados por la división Motorsport. Sin embargo, desde hace unos años comenzaron a ganar cada vez más terreno los M Performance. Sucede que los M eran tan potentes y con prestaciones tan extremas -además de sus precios prohibitivos- que comenzó a generarse una brecha donde había lugar para deportivos no tan salvajes.
Hoy BMW cuenta con versiones M Performance en casi toda su gama de modelos y durante los últimos días probamos en Motor1 la más reciente en llegar a la Argentina: el M340i xDrive. No es un M3, pero tiene prestaciones que superan de manera holgada a generaciones anteriores del deportivo más famoso de BMW.
Tiene un precio de lista de 112.900 dólares, lo probamos durante una semana y la crítica completa se reproduce a continuación.
POR FUERA
En agosto de 2019 probamos la nueva generación del BMW Serie 3. La crítica del Serie 3 G20, en su versión 330i SportLine se puede leer acá. Esa variante tiene 258 caballos de potencia, tracción trasera y cuesta 81.900 dólares. El M340i xDrive que ves acá tiene 387 cv, tracción integral y cuesta 31 mil dólares más.
No cambia sólo la mecánica, también hay novedades estéticas. La trompa tiene tomas de aire más grandes, para refrigerar mejor el motor y los frenos. Y cuenta con una parrilla diamantada, más llamativa que en el 330i. Además, el M340i viene de serie con el Paquete Aerodinámico M, que incluye faldones laterales, spoiler sobre la tapa del baúl y difusor trasero con doble salida de escape más voluminosa (cabe un puño cerrado en cada caño).
Todo eso se combina con llantas de aleación M de 19 pulgadas, calzadas con Pirelli PZero de dos dimensiones: 225/40R19 adelante y 255/35R19 atrás. Son neumáticos RunFlat, que se pueden seguir usando a bajas velocidades incluso con la rueda pinchada. Por ese motivo, no tiene rueda de auxilio: no es una buena solución para nuestros caminos y distancias.
En términos de diseño, este M340i tiene una clara ventaja con respecto al nuevo M3: tiene la parrilla frontal con el doble riñón convencional. Esta versión se diseñó justo antes de que los estilistas de BMW comenzaran a jugar con riñones cada vez más grandes, desproporcionados y polémicos. Por si no queda claro: me parece mucho más lindo este M340i que el nuevo M3 (la mecánica es otra cosa, por supuesto).
¿Y contra quiénes compite el M340i? El rival más directo en nuestro mercado es el Mercedes-Benz C 43 AMG Sedán 4Matic (390 cv, 122 mil dólares), que se vende desde octubre de 2019. En algún momento debería llegar al país la nueva generación del Audi S4 Sedán, que en algunos países se ofrece con motores turbonafteros y turbodiesel (entre 347 y 354 cv, siempre con tracción Quattro).
POR DENTRO
No es un “M puro”, pero es un M Performance. Eso significa que el interior tiene mejor calidad de terminación, materiales más refinados y una estética más deportiva que el 330i SportLine. Eso se nota en las butacas (tapizadas en Cuero Vernasca), el volante y la pedalera, además de otros detalles como los revestimientos y comandos en aluminio. Es que, desde hace años, las divisiones deportivas como M y AMG no sólo se esfuerzan por ofrecer vehículos de altas prestaciones. También se caracterizan por ser la última palabra en materia de calidad de fabricación. Eso se nota mucho en este M340i.
Además, el M340i viene más equipado que los otros Serie 3 que se venden en Argentina. Por ejemplo, el baúl mantiene la capacidad de 480 litros, pero agrega un apoyabrazos central trasero que comunica con la zona de carga, para transportar objetos largos (como esquíes). También añade dos puertos USB en las plazas traseras y cinturones de seguridad con la firma M. Además, los apoyacabezas traseros son rebatibles, para ganar mejor una mejor visión hacia atrás.
El M340i viene con techo corredizo, lo cual no es una virtud sino que destaca un defecto de los otros Serie 3, que no lo ofrecen en Argentina. Lo mismo vale para el sistema Head-Up Display, que proyecta información del tablero en el parabrisas.
Me encantó el diseño, la calidad, todo el equipamiento de la cabina y el espacio cómodo para cinco adultos. Sólo me costó un poco la conectividad: no logré hacer funcionar el cargador de teléfono por inducción y no pude usar los enchufes USB-C (por suerte hay un USB convencional).
SEGURIDAD
El equipamiento de seguridad es el mismo del 330i SportLine (leer crítica). Eso significa que viene de serie con seis airbags, frenos ABS con EBD, control de estabilidad, control de tracción y anclajes Isofix. También cuenta con varias ayudas a la conducción, como alerta de riesgo de choque, control de crucero adaptativo y sistema de estacionamiento automático.
Además, cuenta con el Reversing Assistant. Es una función de manejo semi autónomo que permite escapar -marcha atrás- de lugares estrechos o complejos de maniobrar. Tiene un software que memoriza los 50 metros finales de cada maniobra y es capaz de desandarlos en reversa, maniobrando, esquivando obstáculos, acelerando y frenando. Se puede ver mejor en este video.
Hubiera sido interesante que, además de estas asistencias, el Serie 3 también llegara a la Argentina con Frenado Autónomo de Emergencia. Es un dispositivo vital, que incluso ya ofrecen muchos autos de producción nacional. El radar que se ve en la trompa de este M340i se usa sólo para el control de crucero adaptativo, que cuenta con función Stop&Go que detiene el vehículo a cero en situaciones de tránsito pesado, con arranque automático cuando el auto que marcha adelante se vuelve a mover.
Esta generación G20 del Serie 3 ya fue sometida a las pruebas de choque de EuroNCAP. Obtuvo la calificación máxima de cinco estrellas, pero es necesario aclarar que en Europa viene de serie con Frenado Autónomo de Emergencia y varias asistencias a la conducción (Adas). Esos dispositivos no están disponibles en Argentina.
MOTOR y TRANSMISIÓN
Acá está la gran diferencia. Bajo el capot lleva un clásico seis cilindros en línea de BMW. Tiene tres litros de cilindrada y turbo, con los que desarrolla 387 cv entre 5.800 y 6.500 rpm, además de unos brutales 500 Nm entre 1.800 y 5.000 rpm. Es el mismo block que usan otros modelos de BMW identificados con el número “40”, como la X3 M40i (leer crítica).
Este impulsor se combina con caja automática ZF de ocho velocidades, pero en la versión Steptronic Sport: esto significa que agrega el sistema de Launch Control, al ya conocido sistema de convertidor de par con levas del cambio en el volante.
Como es M Performance y xDrive, significa que también tiene tracción permanente en las cuatro ruedas, con tren de rodaje M. Esto incluye diferenciales más robustos, dirección deportiva con asistencia eléctrica variable y suspensión deportiva con amortiguadores y espirales más firmes, además de una altura rebajada en 10 milímetros con respecto al 330i.
Se pueden elegir cinco modos de manejo: Comfort, Eco, Sport, Sport Plus e Individual, que ajustan la respuesta del acelerador, el seteo de la caja de cambios, el Launch Control y hasta el sonido del escape.
COMPORTAMIENTO
Cuando encendés el motor, el sonido de arranque del seis cilindros te va a encantar: ronco y con un breve rugido al comenzar. Pero, más allá de eso, en el uso convencional no vas a notar grandes diferencias. Los neumáticos de perfil bajo tienen un andar más firme que en el 330i, pero no es nada grave. El menor despeje del suelo te obliga a ser más cuidadoso en cunetas y lomos de burro (otra vez, nada preocupante).
La insonorización de la cabina es excelente y todo funciona con la mayor suavidad. Hay pocos indicios de que estamos ante un M Performance. Es un sedán fabuloso para el uso diario en ciudad: confortable, ágil y muy tranquilo.
¿Te gustaría un M340i con caja manual o modos Drift para el xDrive? Eso ya es patrimonio de los M más puros, como los nuevos M3 y M4. Este es un M340i y su especialidad es el equilibrio entre el confort para el uso diario y las muy altas prestaciones.
También es una mecánica muy eficiente: gasta una media de 7.3 litros cada 100 kilómetros. En ciudad puede llegar a 12 l/100km y en ruta a 120 km/h (con el motor en octava y a sólo 1.800 rpm) se conforma con 6.2 l/100km. ¿Y cuando acelerás a fondo? No te sorprendas si acariciás los 20 litros cada 100 (pero qué linda manera de quemar combustible).
Sin embargo, cada vez que te subas a una autopista o ingreses en una ruta, vas recordar por qué tiene el logo de la M por todas partes: las reacciones son explosivas. Este motor es uno de los mejores seis cilindros en líneas que jamás se hayan fabricado y por eso hoy BMW utiliza este block en una enorme gama de modelos y versiones.
Los 500 Nm de torque desde las 1.800 rpm son garantía de clavarte la espalda contra el respaldo y someterte a reacciones brutales: acelera con Launch Control de 0 a 100 km/h en 4.7 segundos y su velocidad máxima está limitada a 250 km/h.
Que la brutalidad del motor no opaque la genialidad de la caja Steptronic Sport: es la sociedad más perfecta y colaborativa desde la dupla Verstappen-Pérez. El motor es Max: una brillante maquinaria que no para de atacar, provocar y demostrar que puede ir siempre más allá de cualquier límite. La caja es Checo: un ladero que te brinda siempre la relación ideal, con rapidez y eficiencia, para que el motor brille en toda su plenitud.
La tracción integral xDrive agrega una dosis extra de efectividad: es un Christian Horner, que mantiene todo en orden y corrección, para que toda la potencia y el torque fluyan hacia el pavimento, sin errores ni distracciones.
Eso sí: no deja de ser un BMW. Eso significa que el temperamento y el comportamiento básico del auto serán muy similares a un clásico BMW con tracción trasera. Para probarlo a fondo lo llevamos al Circuito 6 del Gálvez, la pista del Ranking Motor1 (habrá crítica en pista más adelante).
CONCLUSIÓN
Todos soñamos con tener un BMW M3 o M4. Mi fantasía es aún más recurrente desde que pude manejar un M3 E30 de 1989 (leer nota). Sin embargo, no sólo son autos de prestaciones brutales. Sus precios de venta también son exorbitantes. Es el motivo por el cual, en Argentina, BMW todavía no confirmó la llegada de las nuevas generaciones de estos deportivos más extremos.
El M340i xDrive es mucho más que un premio consuelo. Si bien su precio sigue siendo muy exclusivo (112.900 dólares), el valor es casi la mitad de lo que podría costar un M3 en nuestro mercado. Y, sin embargo, ofrece prestaciones fabulosas, que sólo se pueden disfrutar de manera plena y absoluta en un circuito: eso es lo que veremos en breve en Motor1.
A todo eso hay que agregarle que el M340i tiene la parrilla frontal convencional, sin caer en la polémica trompa que estrenaron los nuevos M3/M4. Es una berlina tradicional y elegante, pero con la mejor tradición de M Performance bajo el capot.
Ya sé que la marca gana mucha plata con las SUVs y que por estos días está apostando todo a los autos eléctricos, pero durante la semana que manejé este M340i no pude dejar de pensar: “Carajo, qué bien le salen los sedanes de seis cilindros a BMW”.
C.C.
Fotos: Orly Cristófalo
BMW M3