Texto de Paul “Coloflow” Szebesta
Piloto oficial de Autoblog y creador de Racing Films
Nota complementaria al video del Ranking de Autoblog (ver video abajo)
Bueno, hasta acá ya hablamos de lo bueno y lo malo que tiene cada uno individualmente (ver notas aparte del Chevrolet y el Ford). Ahora llegó el momento de compararlos, ya que si bien pertenecen al mismo segmento -y tienen potencias y dinámicas parecidas- a la hora de acelerarlos en la pista se comportan muy diferentes.
Por eso, analicemos la vuelta de cada uno a ver porque el Mustang prevaleció sobre el Camaro.
Ya en la recta, el Mustang GT adquiere más velocidad que el Camaro. El Mustang desarrolla en el inicio de ese tramo unos 10 km/h más que el Camaro, obra de su caja de cambios de tan corta relación, lo cual hace que el motor trabaje permanentemente a un régimen alto de revoluciones, entregándonos un poco más de potencia que el Camaro, el cual tiene que “remar desde abajo” para enroscar el motor. Llegando al final del paredón de boxes, el Mustang tiene una muy pequeña ventaja por sobre el Camaro y las velocidades quedan casi igualadas al llegar al frenaje, marcando 223 km/h de tablero el Mustang y 222 km/h el Camaro, al momento de empezar a frenar para entrar en la Curva 1.
El frenaje es similar en ambos autos, aunque al Mustang se lo siente y se lo puede ver en el video bastante más firme que al Camaro, debido a la mayor dureza que tiene en su suspensión. Este factor también marca una diferencia en el tránsito de la curva, ya que mientras el Mustang se mantiene estable y conserva la trayectoria, el Camaro empieza a balancearse y nos obliga a ser más cuidadosos con el volante para que no se cruce mientras lo aceleramos. En la salida también tiene ventaja el Mustang una vez más por su caja de cambios que enseguida nos lleva a regímenes altos de revoluciones entregando toda la potencia que tiene. El Camaro también tiene una muy buena salida ya que le gana en torque al Mustang, pero también es contraproducente ya que tiende a patinar más fácilmente con el tren trasero.
En La Confitería los dos autos transitan por lugares distintos. Esto se debe a que el Mustang si bien dobla muy bien, en cuanto lo trabamos de más, el riesgo de que empiece a patinar aumenta considerablemente, y no hacer el radio ideal no lo perjudica, debido nuevamente a su caja de cambios que nos acelera más rápido que la del Camaro. Con el Camaro sí hay que hacerla más redonda para poner el volante derecho lo más temprano posible y empezar a acelerar a fondo de nuevo, sin que patine.
Estas conductas se repiten a lo largo de toda la vuelta, donde el Mustang en cada uno de los sectores, además de hacer todas las maniobras de manera más firme y prolija, se recupera mejor en la salida de las curvas.
Por suerte, la “manquié” con ambos y mientras casi me giro con el Mustang en La Entrada Al 9, unos metros más adelante se me pondría muy de costado el Camaro. Creo que perdió más tiempo el Mustang, ya que en el sector donde se me cruzó el Camaro, mucho más rápido no se puede ir, porque hay que frenar para entrar a la Curva del Ombú.
Saliendo de ese sector, una vez más vemos cómo el Mustang adquiere mayor velocidad que el Camaro en el pique hasta el Tobogán y a su vez cómo transita mucho mejor el Mustang que el Camaro la bajada del mismo.
Mi conclusión es que, para este uso, el Mustang GT funciona mejor. Por lo que veo en los comentarios hay varios lectores ‘blanco o negro’, sin lugar a los ‘grises’. Para ellos puedo decir que si bien el Mustang hizo mejor tiempo y se comporta mejor, la sensación que ofrece el Camaro al acelerarlo a fondo y sentir cómo empuja con todo su torque a bajas revoluciones es simplemente increíble. Y en este punto el Mustang no lo puede igualar.
También se discutió sobre si el Camaro está en desventaja por ser Convertible. La realidad que hasta que no pruebe el Camaro Coupé no puedo dar una opinión precisa, pero no creo que existan grandes diferencias entre uno y otro, ni que este haya sido el factor por el cual el Camaro llegó segundo a la meta.
Lo que sí voy a criticar una vez más en ambos son las butacas para nada envolventes, las cuales cambian para sus versiones más extremas (Mustang Shelby GT500 y Camaro ZL1), pero que creo que le vendrían muy bien para estas versiones intermedias también.
Por otro lado, también es cierto que en su mercado de origen existe un nuevo modelo de Camaro, con varias mejoras según pude investigar, pero que aún no llego a nuestro país. A pesar del triste presente que atraviesa el sector automotor nacional, ojala ese modelo llegue a nuestro país y nos dé la excusa perfecta para reeditar este hermoso desafío americano.
Coloflow (@PaulSzebesta_)
Producción: RacingFilms, Hernando Pollicelli, Magali Flaks, Ciudad Autódromo y Autoblog.
Aclaración: Esta prueba de manejo fue producida antes del período de cuarentena decretado por el Gobierno argentino.
***
VIDEO: Ranking Autoblog –Mustang vs Camaro”
***
VIDEO: El backstage de los muscle-cars
***