Se llama Passat B8. Y no hay ningún error de ortografía. Así denomina Volkswagen a la octava generación de su sedán para el Segmento D (mediano). Tardó tres años en llegar a nuestro país, teniendo en cuenta que para el mercado europeo se presentó en 2014.
Se ofrece en dos versiones: Highline (59.900 dólares, ver equipamiento) y R-Line (65.000 dólares, ver equipamiento). Los dos tienen la misma mecánica: 2.0 turbo naftero, con 220 cv y caja automática DSG de seis marchas.
El lanzamiento oficial del Passat B8 en la Argentina fue hace dos semanas, con una fastuosa fiesta en el Palacio Sans Soucí (ver apuntes del evento). Lo curioso es que allí no se mencionó un detalle: apenas lanzado, este Passat tendrá pronto algunos cambios.
La cosa es así: en este momento se encuentra en el garage de Autoblog un Passat 2.0 TSi Highline. Como verás en las fotos, cuenta con un sistema multimedia Discover Pro App Connect, con pantalla táctil de ocho pulgadas.
La cuestión es que, esta semana, los concesionarios VW comenzaron a informar a sus clientes que el próximo embarque de unidades vendrá con un equipo multimedia más moderno: Infotainment Discover Pro, con pantalla táctil más grande (9,2 pulgadas) y comandos simplificados (ver fotos abajo).
No es grave. Lo importante es el desafío que el Passat B8 tiene por delante en el mercado argentino.
Su rival más directo, el Ford Mondeo 2017 (ver Focus Group), tiene un motor más potente y precios mucho más competitivos: entre 646.900 y 764.700 pesos.
En la presentación en el palacio afrancesado de la localidad de Victoria, el responsable de Marketing de Volkswagen Argentina, Martín Sorrondegui, le aseguró a la prensa que el Passat terminará el 2017 con más unidades patentadas que el Mondeo.
Con una disparidad de precios tan grande, ¿con qué argumentos lo lograrán?
Tenemos una semana para intentar averiguarlo.
C.C.
***
El VW Passat 2.0 TSi Highline cuesta 59.900 dólares. Pero ese interior pronto recibirá cambios.
***
ADEMÁS En el Twitter de @Autoblogcomar