Hay pocos modelos que ofrezcan en el mercado argentino tantas opciones de configuración como la gama del Audi A5. El modelo del segmento mediano -que llegó a la Argentina en 2008 en forma de Coupé- amplió de a poco su oferta con la incorporación de las carrocerías Sportback (cinco puertas) y Cabrio.
En mayo pasado se lanzó a la venta un restyling de media vida de esta generación, que comparte plataforma con el A4. Los cambios estéticos fueron menos notorios que las novedades mecánicas y de equipamiento (ver nota de lanzamiento).
Así, la gama A5 hoy ofrece tres tipos de carrocerías (Coupé, Sportback y Cabrio), cuatro motorizaciones (2.0 TFSi de 211 cv, 3.0 TFSi de 272 cv, 3.0 TFSi de 333 cv y 4.2 FSi de 450 cv) y tres tipos de cajas de cambio (manual de 6 velocidades, Multitronic de variador continuo con ocho marchas y S-Tronic de doble embrague con siete velocidades).
Tampoco hay que olvidar que se puede elegir entre tracción delantera o integral Quattro.
Dentro del promedio de 55 unidades mensuales que se patentan del Audi A5 -y entre las 13 combinaciones posibles-, la más vendida en la Argentina es la que ahora está en el garage de Autoblog: Sportback 2.0 TFSi Multitronic, con un precio a partir de 70.735 dólares.
Es la versión más accesible de toda la familia A5 en nuestro país, ¿pero esa es la única razón de su éxito?
Lo cierto es que también se perfila como la más práctica y racional, por más extraño que resulte utilizar estos adjetivos con un auto de este precio y diseño.
La crítica completa se publicará la semana que viene.
C.C.