El ministro de Economía argentino, Luis Caputo, anunció ayer que tiene listo un decreto para reducir los aranceles de importación para una amplia gama de productos. Entre ellos figuran las motos terminadas, los componentes de motos para el ensamblado local y los neumáticos (ya sea para autos o motos).
Los aranceles son las tasas aduaneras que tributan los productos importados al llegar al país: son una barrera impositiva para proteger a la industria nacional, aunque en la práctica muchas veces fueron aprovechados para que los productores locales establecieran posiciones monopólicas y se generaran abusos de precios.
"A través de un decreto estamos reduciendo aranceles a múltiples bienes de consumo que tenían aranceles elevados. Estas reducciones arancelarias son parte de un paquete de medidas para favorecer el comercio exterior impulsadas por la Secretaría de Industria y Comercio del Ministerio de Economía, como la disminución de aranceles de insumos plásticos, fertilizantes y herbicidas realizada en mayo de este año", explicó Caputo en un comunicado oficial (ver abajo).
Los productos beneficiados por esta medida pertenecen a diferentes rubros de la economía, pero los que pertenecen al mundo de los vehículos y el transporte son los siguientes.
Como puede apreciarse, la rebaja arancelaria afecta tanto a motos importadas ya armadas y listas para comercializar (CBU), como a motos semi desarmadas (SKD, donde hay mano de obra local para el ensamblado) y completamente desarmadas (CKD, donde el proceso de ensamblado es más complejo). Las motos desarmadas e incompletas que se ensamblan de manera local y con la incorporación de algunas piezas de producción nacional (IKD) ya contaban con beneficios aduaneros.
En el sector de las motos se espera una mayor competencia de productos importados y costos más competitivos, que deberían traducirse a los precios al público. De todos modos, se espera que el mayor impacto en los precio se produzca a partir de enero, si es que el Gobierno de Javier Milei cumple con la promesa de eliminar el Impuesto PAÍS (leer más).
¿Siguen los autos?
La gran incógnita es qué harán Caputo y Milei con el sector de los autos. A diferencia de las motos, el comercio exterior de los autos en Argentina está regido por los acuerdos del Mercosur. Tanto Argentina como Brasil hoy cobran un arancel del 35% a los autos importados, para proteger a los vehículos fabricados dentro de la zona del Mercosur. Durante el anterior Gobierno de Jair Bolsonaro, Brasil amagó con la posibilidad de reducir esa barrera a sólo el 12%, sin embargo el plan no llegó a concretarse. Con el regreso de Lula Da Silva al poder en Brasil, hoy el país vecino habla de subir el arancel aduanero hasta el 38%, sobre todo para proteger a las industrias locales de la invasión de autos eléctricos chinos.
Caputo y Milei no podrían tomar una decisión unilateral, sin consultar con Brasil, con respecto a los aranceles que tributan los autos en Argentina. A no ser que la intención de Milei sea romper con el Mercosur: esa fue, justamente, una de sus promesas durante la campaña electoral (leer más).
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