Hasta hace unos meses, las automotrices podían importar vehículos en la Argentina con dos modalidades: pagando con dólares del Banco Central (al tipo de cambio oficial, pero con esperas de hasta un año para conseguir la aprobación oficial de la SIMI/SIRA) o con el "Dólar Frank Sinatra" (la opción “dólares propios”, de trámite más veloz aunque costoso, leer más).

Sin embargo, a partir de que se activó el swap con China para realizar un intercambio de pesos argentinos con yuanes del país asiático, el Banco Central pasó a tener en sus reservas el equivalente a 5.000 millones de dólares en moneda china. Esos yuanes están siendo utilizados para pagar de manera directa importaciones provenientes de China, sin utilizar los escasos dólares del BCRA.

Las principales beneficiadas de esta modalidad son los importadores de autos chinos, que ya lograron ingresar 800 vehículos al país usando esta modalidad. La conversión de pesos a yuanes se hace tomando como intermediaria la cotización del dólar oficial, aunque sin utilizar la moneda norteamericana.

El beneficio, por ahora, es para los importadores de autos chinos, que de esta manera consiguen ingresar productos que tenían demorados, además de lograr un mayor margen de ganancia. En los concesionarios, los clientes por el momento no están viendo esta ventaja: puede ser que haya más stock de autos chinos, pero los precios no bajarán a pesar de que ahora utilicen un tipo de cambio de importación más conveniente.

En 2022, los autos chinos más vendidos en la Argentina fueron los Ford Territory, Chery Tiggo4, Chery Tiggo2 y Baic X35 (ver estadísticas). El diario Clarín publicó un informe especial acerca de esta nueva modalidad de importación creada a la medida de los autos chinos. Se puede leer completo acá abajo.

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Nota del diario Clarín

El refugio de valor menos esperado: autos chinos, pagados con yuanes a valor oficial

El Banco Central no le vende dólares al importador: utiliza el "swap" de reservas en moneda china, equivalente a US$ 5.000 millones. En lo que va del año se vendieron unos 800 vehículos.

Por Luis Ceriotto

¿Quién ha visto alguna vez un yuan? A diferencia de los dólares de los que ya se burlaba Perón en 1948, o incluso los euros, la moneda de la República Popular China no es vista por los ahorristas como un refugio de valor.

Sin embargo, durante el primer cuatrimestre de este año hubo casi 800 compradores de vehículos cero kilómetro que, de manera indirecta, adquirieron al Banco Central millones de yuanes que fueron usados para pagar esas importaciones.

Con los vehículos importados de alta gama, como señaló Clarín esta semana, el Gobierno optó por la vía pragmática y ahora acepta el pago con dólares en efectivo por parte del cliente, para no exigir el uso de reservas del Banco Central. Esa modalidad fue incorporada en el Sistema de Importaciones o SIRA, para destrabar importaciones que llevaban frenadas hasta más de dos años por el cepo.

Desde noviembre ya ingresaron cerca de 2.000 unidades de alta gama, cuyo precio tiene un componente de dólar billete ($488 por unidad, al cierre del martes) que comprende al menos el 50% del precio final.

Con los vehículos chinos la situación es distinta: al igual que todos los vehículos importados, sus listas de precios están nominadas en dólares. Pero en este caso, la Secretaría de Comercio y el Banco Central aprueban las importaciones por la vía tradicional, esto es, con el importador adquiriendo las divisas a precio oficial en el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC). En vez de 488 pesos por dólar, los compradores pagan 242 pesos (cierre del martes) por unidad.

¿Por qué algunos autos sí y otros no? La diferencia es la fuente de financiamiento. Los vehículos chinos no se pagan con dólares, sino con los yuanes que el Banco Central atesora entre sus reservas. Equivalen a unos 5.000 millones de dólares (cada yuan equivale a 0,14 dólar) y las automotrices chinas, desde ya, aceptan que se les pague con esa moneda.

Así lo describió uno de los principales integrantes de la Cámara de Importadores y Distribuidores de Automotores (CIDOA). "Los que tenemos representación de marcas chinas de autos tenemos la opción de usar yuanes para pagar. Las SIRA salen fácil con esa opción. En China podés pagar con dólares o con yuanes y el Banco Central tiene un fondo en yuanes equivalente a 5.000 millones de dólares”, medio muerto de risa graficó.

En ventas, los autos chinos no son precisamente líderes: en total, los vehículos de ese origen sumaron 756 patentamientos entre enero y abril, contra un total de casi 150.000 (menos del 0,3%).

En la Argentina hay 13 marcas de origen chino, que confluyen en la cámara CIDOA. La líder del sector es Chery, con apenas 179 patentamientos en los primeros cuatro meses del año.  Chery es una de las marcas con más trayectoria en el país y con una planta ensambladora en Uruguay. La representación desde hace 15 años la tiene el grupo Socma. Fundado por Franco Macri, el fallecido padre del ex presidente, Socma había sido líder de la fabricación de autos en la Argentina en los años '80 y '90, cuando tuvo la representación de la ex Sevel (Fiat y Peugeot). Franco Macri llegó a anunciar, en 2008, que Chery invertiría 500 millones de dólares en una fábrica en el país, proyecto que nunca se concretó.

Ahora quien hizo un anuncio similar es el embajador argentino en China, Sabino Vaca Narvaja, quien en febrero aseguró que la empresa le había confirmado una inversión de 400 millones de dólares para instalar una fábrica. La representación comercial de Chery sigue siendo de Socma, la cual no participó de ese anuncio. Tampoco hubo ejecutivos de Chery acompañando al embajador argentino.

Otras dos marcas, Shineray y Changan, ensamblan camiones chicos en la Argentina. En La Plata, la empresa local Ralitor produce la versión local del camión chico Shineray T30. Mientras que en La Rioja está Changan Argentina, representada por Omar Daneri (primo de Manuel Antelo), que ensambla el camión chico en formato pick up MD201.

La segunda marca china más vendida en lo que va del año es Foton (167 unidades), fabricante de camiones chicos y utilitarios. Le siguen BAIC (72 unidades), Haval (54) y Shineray (54): estas tres marcas incluyen en su gama de productos importados costosas camionetas tipo 4x4, cuyos precios en dólares las acercan a sus competidoras de Europa o Corea. La diferencia es que a esas marcas se les puede pagar con el "swap" de yuanes.

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