Fuente: NASA
El principal plan de la NASA para devolver humanos a la Luna continúa avanzando con Artemisa: su programa para llevar a la primera mujer y al próximo hombre a la luna para 2024. Sabiendo que la radiación espacial es uno de los mayores peligros que enfrentan las tripulaciones, la NASA planea enviar tres pasajeros, que de hecho son maniquíes, que vuelan al extranjero para probar los sistemas de la nave espacial y estudiar los efectos de la radiación en los cuerpos. ¿La mejor parte de todo esto? dos de ellos son mujeres.
Los tres maniquíes que van a la misión de la NASA son el comandante Moonikin Campos, Zohar y Helga. el primero es un maniquí de cuerpo masculino utilizado anteriormente en las pruebas de vibración de Orion. Campos ocupará el asiento del comandante para registrar los datos de aceleración y vibración a lo largo de la misión. Los datos recopilados ayudarán a la NASA a proteger a los astronautas durante Artemis II, la primera misión en más de 50 años que enviará a la tripulación alrededor de la Luna.
Traje de vuelo para despegues y aterrizajes. Con estos maniquíes se analizará la exposición a radiación de los cuerpos de los tripulantes.
En cuanto a los muñecos femeninos, la NASA está enviando dos torsos humanos modelo con cuerpo femenino también conocidos como fantasmas. llamados Zohar y Helga, los fantasmas tienen una cuadrícula de tres centímetros incrustada en los torsos que permitirá a los científicos mapear las dosis de radiación interna en áreas del cuerpo que contienen órganos críticos. Con dos torsos idénticos, los científicos podrán determinar qué tan bien el nuevo chaleco que llevarán los fantasmas protegerá a la tripulación de la radiación solar, al tiempo que recopilarán datos sobre cuánta radiación podrían experimentar los astronautas dentro de Orión en una misión lunar, condiciones que no pueden ser recreado en la tierra.
El cohete SLS de la NASA y la nave espacial Orion, junto con un sistema comercial de aterrizaje humano y una puerta de enlace en la órbita lunar, son vitales para los planes de exploración del espacio profundo de la agencia. Usando robots y humanos para explorar más que nunca, la NASA también usará la luna para el próximo salto gigante de la humanidad, enviando a los primeros astronautas a Marte.
La complejidad de los dispositivos de medición y registro actuales permiten embeber esa tecnología en los maniquíes de test que se enviarán en viajes espaciales.