Titanic es una película a la que ya le contaron el final, sin embargo de la mano de su director James Cameron aparece una historia para nada previsible.

Este barco ha sido revivido en su esplendor de 1912, así como lo son esos cándidos años de principio del siglo XX, poco antes del estallido de la Primera Guerra Mundial y de la crisis financiera de finales de los años veinte. Ese orgullo británico victoriano y marítimo se va desmoronando a la par Tanto se hunde el declarado insumergible Titanic, como las clases dominantes que van a bordo, con su soberbia y privilegios.  Unas pinceladas muy bien aplicadas de arte, romance y acción, para un ritmo de tres horas quince minutos que dura el film. Saltos temporales entre los exploradores que encuentran al barco hundido y las escenas de cada día del primer y último viaje de esta nave.

Su preproducción, rodaje y finalización fueron arduos, dadas las habituales exigencias del director. Todos terminaron detestándolo, pero la película ganó la mayoría de sus nominaciones y fue un éxito en taquilla. La visión y el particular tratamiento del guión pusieron a comparar las dos escalas-un barco gigantesco vs. el drama humano en la lucha de clases a través de un romance; la escala humana, casi insignificante. Coctel seguro para mantener a todo tipo de espectador a la butaca.

 

El verdadero Titanic listo para hacerse a la mar. Su viaje inaugural prometía un record de velocidad, pero concluyó en el fondo del océano.

 

El descubrimiento y las imágenes captadas por sumergibles teledirigidos produjo un boom y renovado interés por el gigante sumergido. Más de diez años después se pudo rodar esta superproducción que involucró a tres estudios y a todo un arsenal de efectos especiales mecánicos y digitales. Fue una costosa película que no solo recuperó su inversión, sino que fue la que más recaudó en su tiempo.

 

La pareja protagónica de Leonardo DiCaprio y Kate Winslet consiguieron cautivar a los espectadores que buscaban el contrapunto romántico entre dos jóvenes de diferentes clases. Energía pura en pantalla.

 

Pesados en el Cine

Los Pesados también admiramos al gran protagonista de la película, el Titanic luce grandioso en todo su aspecto exterior y además James Cameron no olvidó hacer un clip de pasada por su enorme cuarto de máquinas, justo cuando la bestia se hace a mar abierto y pone sus calderas a máxima presión de vapor. La energía del siglo XIX hace un show de despedida, acelerando a ritmo frenético. -¡Llévelo al mar Mr. Murdoch!- Ver video abajo.

 

Escenas reales fueron recreadas, por lo que hubo gran fidelidad al material fílmico que se conocía sobre este gigantesco crucero de lujo. Aquí partiendo de Southampton, puerto donde transcurren las primeras imágenes de Titanic.

 

Pesados en el Cine

Una escenografía casi de tamaño real y efectos digitales completaron las vistas de exteriores durante el viaje.  Vapor, acero y madera.

 

A bordo es un palacio flotante en el cual se perdía dimensión de la tragedia en ciernes. El final de una época se identifica con este aparatoso hundimiento.

 

Llévelo al mar Mr. Murdoch - Video


 

Titanic Trailer - video

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