Texto de Carlos Cristófalo
Ante la falta de dólares, el gobierno de Alberto Fernández aplicará cupos a las importaciones de autos (leer nota). No es una idea nueva. En 2012, la entonces presidenta Cristina Kirchner impulsó el “Uno a Uno”: a raíz de la escasez de divisas y el déficit crónico de la balanza comercial, el Estado obligó a los importadores de autos a convertirse en exportadores.
Lo más veteranos de esta industria recuerdan aquellos días como si fuera ayer: sentados al frente de una larga mesa y con un enorme cuadro de CFK a sus espaldas, la ministra de Industria, Débora Giorgi, y el secretario de Comercio, Guillermo Moreno, tomaban nota con lapicera sobre las promesas de las automotrices.
La idea era que cada marca exportara un dólar por cada dólar que ingresaran al país en forma de autos: "Uno a Uno". Para las terminales fue más sencillo: desde sus casas matrices anunciaron el envío de divisas para realizar inversiones en las fábricas radicadas en nuestro país. Otras abrieron nuevos mercados de exportación para sus productos de fabricación local, que les permitieron ingresar dólares a las cuentas del Estado.
Los importadores -sin fábricas y algunas con escaso apoyo de sus casas matrices- tuvieron que apelar al ingenio. La solución que encontraron muchos de ellos fue firmar acuerdos con empresas agroexportadoras. Les compraron sus certificados de exportación para presentarlos ante Giorgi y Moreno. Con esos comprobantes anunciaron que se habían convertido -de la noche a la mañana- en grandes exportadores de vino, maní, biodiesel y hasta “agua mineral premium”.
En la jerga, hoy se lo recuerda como el Plan Marolio (por aquello de “mate, café, harina y palmitos…”).
Autoblog rescató de sus archivos los viejos comunicados de Industria y Comercio, donde se detallaban los compromisos de cada marca de autos para poder ingresar vehículos a la Argentina. Marca por marca, se cita de manera textual el plan informado en las gacetillas del Gobierno.
* Alfa Romeo: “Presentaron una proyección superavitaria en su balanza comercial a partir de una nueva inversión de US$ 2,5 millones que realizarán para instalar una nueva planta de fabricación de biodiesel, en el parque industrial de Pilar, que le permitirá exportar en 2012 por un valor cercano a los US$ 11,5 millones”.
* BMW: “La empresa desarrollará en el país, para la exportación, componentes automotrices, cuero para tapizados de varios de sus modelos y arroz procesado”.
* Chery: “Se comprometió a revertir una balanza deficitaria de US$ 38 millones en 2010 para pasar, en 2012, a un superávit comercial por US$ 22 millones, mediante el aumento de sus exportaciones y el aumento de compras de Chery Uruguay a autopartistas argentinos”.
* Hyundai: “Exportará maní, vinos, biodiesel y harina de soja por más de US$ 157 millones. Además, la firma realizará un aporte irrevocable de capital de US$ 8 millones”.
* Jaguar, Land Rover y Volvo: “Compensa importaciones con exportaciones de terceras empresas a Chile. Son todas operaciones nuevas, promovidas por el Grupo DITEC chileno (vinculado a la empresa). Compromete además un aporte de capital de USD 2 millones, por lo que para 2012 tendrá un superávit de USD 2,5 millones”.
* Kia: “Presentó un plan de exportaciones de autopartes –equipos de GNC, amortiguadores y revestimientos de interiores- que importarán las filiales de Kia de Uruguay y de Perú. En el caso de Perú, dos empresas argentinas venderán equipos de GNC a la filial de ese país, la que participa de un programa de renovación de flota de taxis en la ciudad de Lima a través de la cual vende alrededor de 250 unidades mensuales”.
* Mitsubishi: “Compensa importaciones con exportaciones de alimento balanceado, maní y agua mineral premium. Es una operación exportadora nueva que la hace una tercera empresa para Alfacar, que hasta ahora sólo producía para el mercado interno. La empresa tendrá en 2012 un superávit de USD 30 millones”.
* Nissan: “Comprometió un aporte de capital de USD 30 millones y un flujo de exportaciones de terceras empresas (harina de soja, aceite de soja y biodiesel). El comprador es Marubeni (empresa vinculada a Nissan) y tendrán superávit en 2012 de USD 17 millones".
* Porsche: “Compensará sus importaciones con exportaciones de productos que no pertenecen al rubro automotriz, como vinos y productos olivícolas”.
* Resultado: El “Uno a Uno” estuvo vigente hasta noviembre de 2013, cuando asumió Axel Kicillof al frente del ministerio de Economía. Ante la bicicleta financiera que había impulsado la brecha cambiaria entre el dólar paralelo y el oficial, Kicillof decidió aplicar un fuerte cepo al dólar y a las importaciones. También se aplicaron impuestos internos a autos de gama media, como si fueran vehículos de lujo. El Plan Marolio fue reemplazado por un cupo que limitó aún más el ingreso de autos al país. El resultado de estas medidas fue una distorsión del mercado automotor argentino. Ante el desabastecimiento de vehículos, las pocas unidades en stock se vendieron con grandes sobreprecios. Esto se reflejó en las ventas totales. En 2012, se patentaron 840.678 vehículos en la Argentina. En 2013 se alcanzó un récord de 955.023. Y en 2014 el mercado se derrumbó a 683.480 unidades. La segunda parte del Plan Marolio que impulsa el gobierno de Alberto Fernández arranca desde una situación aún más crítica: en este 2020 se estima que no se patentarán más de 350 mil vehículos en todo el país.
C.C.