Wingo es uno de los personajes secundarios menos valorados de la película “Cars” (2006, Pixar). Representa a la perfección el modo de ser, pensar y actuar de los fanáticos del tuning (ver video abajo acerca de su comportamiento social).

Wingo es un auto flúo, con una adicción especial por los alerones sobredimensionados. Y ahora tiene su representante local. La imagen publicada acá pertenece a la comunidad de tuning Fierros Al Piso y muestra a un émulo argentino de Wingo, en la forma de un VW Fox muy modificado.

En febrero de 2008, Autoblog utilizó la imagen de Wingo para publicar -en tiempos de Carnaval- la guía completa para "adictos al tuning". Esa nota de archivo se reproduce acá abajo. No es un refrito de una nota vieja. Es un homenaje al Wingo argentino.

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Primeras señales del Apocalipsis automotor: Wingo vive en la Argentina
El Wingo argentino. Foto de Fierros Al Piso.

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ADEMÁS Nota de archivo – Febrero 2008 Te volviste adicto al tuning si…

Primeras señales del Apocalipsis automotor: Wingo vive en la Argentina

En coincidencia con el clima inimputable de Carnaval, Autoblog está en condiciones de afirmar: “Te volviste adicto al tuning si…”

* El escape de tu auto tiene más decibeles que caballos tu motor.

  • Tu auto de tracción delantera tiene llantas de 17 pulgadas adelante. Y de 13 atrás.

* En el concesionario se niegan a atenderte para el service de los mil kilómetros porque aseguran que ese no fue el auto que te vendieron.

  • Tu auto es invitado a participar en la nueva temporada de Piñón Fijo.

* Llevás una olla de campaña en el asiento trasero (para medir el diámetro del escape que querés comprar).

  • Instalás un alerón gigantesco en la cola, spoilers, deflectores, luces de neón, un estéreo con 15 parlantes y pantalla con DVD, pero eliminás el asiento trasero “para ahorrar peso”.

* La gente de PPG enloqueció tratando de formular el color de pintura que encargaste.

  • Cortás los espirales de la suspensión para rebajar el chasis (pensás que las chispas se ven copadas cuando doblás las esquinas).

* Sos un experto en buscar caminos alternativos para evitar las calles con lomos de burro.

  • Tu alerón trasero es más alto que vos.

* En tu motor hay menos torque que watts en tu estéreo.

  • En una picada perdés el escape (y descubrís que ganaste pique, por la diferencia de peso).

* Gastaste cinco mil dólares en tu motor (aún así, el panadero de la esquina te humilla con su Torino).

  • Creés que ponerle óxido nitroso a un Corsa te va a ubicar a la misma altura de un Corvette.

* Pensás que el Gacel 1.8 es un auto deportivo.

  • Pasaste toda la noche buscando en Internet una empresa que fabrique turbocompresores para tu Duna.

* Creés que la palabra “Momo” es absolutamente indispensable para tener un auto de alta performance.

  • Tenés más salidas de escape que cilindros.

* El color de tu tapizado produce daños en las córneas.

  • Tenés calcos de fabricantes de piezas que no sabés a qué se dedican.

* Tenés más calcos que los segundos que tardás en cubrir el cuarto de milla.

  • Pensaste en ponerle un sticker “Mugen” a tu Honda Econo Power.

* Tenés más neones que una whiskería.

  • Asegurás que ganaste cinco caballos puliendo la toma de aire.

* Estás pensando en robarle el Renault 4 a tu abuela (para instalarle un "kit").

  • Manejás un auto de 8.000 dólares y te gastaste otros 5.000 en tuning. Pero todavía vivís con tus padres.

* Gastaste más en polarizado de lo que vas a gastar todo el año en combustible.

  • Tu auto suena como si fuera a 250 km/h cuando apenas va a 40.

* Consumís más combustible desde que instalaste el “kit aerodinámico”.

  • Tu alerón trasero es tan grande que, a partir de los 60 km/h, la trompa del auto amenaza con levantar vuelo.

* Pasás los semáforos en rojo porque parecen invisibles a través de tus vidrios polarizados… en rojo.

  • Todo el tiempo y en todo lugar provocás a otros automovilistas para correr una picada. Igual sabés que vas a perder.

* Tu hermanita de cinco años es la única persona que elogia la pintura de tu auto.

  • Comprás e instalás las llantas tuning. De a una. Y por trimestre.

* Abriste dos agujeros en tu paragolpes trasero y no sabés para qué los vas a usar.

  • Abriste dos agujeros en tu paragolpes trasero y sí sabés para qué los vas a usar.

* Tuviste que agregar una segunda batería para aguantar el consumo de todas esas luces de neón (y de la bola de espejos del habitáculo).

  • Ponés un alerón trasero en el techo porque estás convencido de que las furgonetas también necesitan "downforce".

* Pintaste tu auto de negro mate y le decís a tus amigos: “¡Miren, parece fibra de carbono!”

  • Tu hermanito está enojado porque le robaste el escape a su scooter (¡y encajó perfecto en tu auto!)

* Tu padre está preocupado porque andás en un auto con menos cilindrada que su cortadora de pasto (y que hace más ruido que su cortadora de pasto).

  • A tus 27 años, las únicas chicas que quieren salir a dar una vuelta en tu auto son tus ex compañeras del colegio (saben que, en el fondo, “sos un buen pibe”).

* Descubrís que todo lo anterior es cierto y ahora estás enojado con el que escribió esto.

C.C.

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VIDEO: "Cars" - Wingo

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