Volkswagen confirmó ayer que los Polo GTS y Virtus GTS se lanzarán a comienzos de 2020. Se trata de las versiones deportivas del hatchback y el sedán para el Segmento B (chico). Estos dos modelos, que se presentaron en forma de concept en el Salón de San Pablo 2018, llevarán el conocido motor 1.4 TSi, que ya utilizan modelos más grandes de VW (Golf, Vento y Tiguan AllSpace).
Este motor turbonaftero tiene 150 caballos de potencia y 250 Nm de torque. Se combinará con caja automática Tiptronic (convertidor de par), con seis marchas. Los GTS tendrán mejoras en frenos, suspensión y dirección, además de una estética más deportiva, con llantas de 17 pulgadas (18”, en opción).
Martín Massimino, gerente general de VW Argentina, ya confirmó la llegada de estos modelos a nuestro mercado (leer entrevista). La novedad es que, con la llegada de los GTS, comenzará el proceso de “democratización” del 1.4 TSi en el resto de la gama VW.
Este será el único motor que, en una primera etapa, usará el llamado Proyecto Tarek que se fabricará en Pacheco: una SUV para el Segmento C (compacto), que se producirá desde la segunda mitad de 2020 (leer más).
Además, permitirá ampliar la gama de versiones de la T-Cross. El modelo actual se ofrece sólo con el MSi 1.6 16v de 110 caballos. Es poco para un vehículo de casi una tonelada y media (leer crítica). La T-Cross 1.4 TSi será sin dudas más costosa, pero ofrecerá prestaciones más acordes con sus rivales de segmento.
Y eso no es todo: el 1.4 TSi es el motor que también utilizará otro futuro Volkswagen. Se trata de la pick-up Tarok, el proyecto favorito del argentino Pablo Di Si, presidente de Volkswagen Latinoamérica. El modelo se expone por estos días en el Salón de Frankfurt y apunta a competir en el segmento de las pick-ups medianas, contra las Fiat Toro y Renault Duster Oroch (leer más).
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