En 1987, Sevel –la automotriz licenciataria de Fiat y Peugeot, controlada por la familia Macri- fabricó un Fiat Uno experimental: el Uno SCV 2000, con motor del Regata 2000, con la intención de llevar un pequeño auto deportivo a la producción. El proyecto no avanzó y sólo se fabricó un ejemplar. El auto de esa historia hoy está a la venta y piden un precio de vehículo de colección: 30 mil dólares (1.2 millones de pesos).
El párrafo que se publica acá arriba es una síntesis del argumento de venta de este “Fiat Uno SCV 2000”, que apareció en los últimos días en los clasificados online. Su actual propietario es Cristian Fernández, quien le envió a Autoblog varios documentos que repasan el historial de este ejemplar único.
La historia del auto, relatada por Fernández en el aviso clasificado, es el siguiente.
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“Vendo Fiat Uno SCV 2000 año 1987/1988 con 70.000 kilómetros reales... para coleccionistas. Sólo se fabricó un auto en los talleres del departamento experimental de Sevel por la gente de ex IAVA: Aldo Baldoni, Rubén Ramos, Juan Carlos Nolan y Juan Carlos Fisanotti, entre otros, pueden dar fe de eso”.
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“Todos ellos estuvieron entre otros involucrados en la fabricación del auto allá por 1987/1988, inscripto por Sevel como Armado Fuera de Fábrica. Dicho por Aldo Baldoni, quisieron hacer un TC2000 con el Fiat Uno, que luego no llegó a serlo y luego quisieron hacerlo de producción, para ello tomaron una de las primeras carrocerías de la línea de montaje (todos sus componentes brasileros), tomaron un Fiat Regatta 2000 y pusieron toda la mecánica y accesorios dentro del Fiat Uno”.
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“El auto se sometió a varias modificaciones estéticas, mecánicas y aerodinámicas, lo usaron alrededor de 50.000 kilómetros de pruebas y viajes por todo el país, incluido Brasil. Luego se desestimó su fabricación porque no llegaba a las expectativas que se habían impuesto, aunque el auto tiene un torque increíble, el consumo y velocidad final fueron fue su Talón de Aquiles y no llegó a satisfacerlos”.
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“Luego quedo en el olvido en un galpón de Sevel y allá por 1997 cuando Sevel deja Fiat remataron lotes de autos en el cual estaba el Fiat Uno SVC 2000, Automotores Gonzalez adquirió el Fiat Uno SCV 2000, el que automáticamente se lo vendió a Ritchie Reist, quien lo tuvo por 20 años y sólo le hizo 20.000 kilómetros”.
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“Ritchie sólo lo uso para ir de Buenos Aires a Mar del Plata hasta que un día por una decisión personal lo dejó cinco años en un quinto piso de una cochera de Flores y no lo usó más, hasta que un día lo conocí. Yo había escuchado la historia del auto, varias historias que luego fui desmitificando logrando hablar con la gente que lo fabricó, el padre natural del auto es Aldo Baldoni quien tiene su taller actualmente en Munro, quien con sus propias manos lo construyó y fue él y Rubén Ramos quienes me contaron la verdad del auto y así pude lograr arma toda su historia. Luego de idas, vueltas, charlas y muchas cosas más, Ritchie Reist decidió vendérmelo. Recuerdo en la escribanía le caían lágrimas de sus ojos. Un auto con mucha historia”.
Todo parece indicar que estamos ante un verdadero “eslabón perdido” de la historia de Sevel. Apareció justo ahora, cuando Fiat acaba de relanzar el nuevo Uno Way en la Argentina (ver equipamiento y precios).
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