El sábado pasado se realizó el tercer Premium Track Day en el Autódromo de Buenos Aires (ver nota). Y allí dos lectores de Autoblog tuvieron un rol protagónico.

Juan Pablo Mozdzien ganó el concurso para una inscripción gratis y corrió con su Fiat 500 Sport. Y Lucas Maranca ganó el sorteo de tres vueltas al Autódromo, en la butaca derecha de un BMW de competición.

A continuación, relatan sus experiencias en primera persona.

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EXPERIENCIA I “Mi Fitito de Track Day”

Por Juan Pablo Mozdzien

La verdad es que la pasé muy bien, nunca había girado en un circuito durante tanto tiempo, así que fue una gran experiencia para mí. Muchas gracias por darme la oportunidad de participar, estoy muy agradecido con Autoblog y la gente de Premium Track Day.

Lamentablemente, mi primera acción del día fue destruir la pantalla del celular contra el mítico asfalto del Gálvez. Estuve incomunicado todo el día, inconveniente que no me impidió erosionar la pista con la Bolita.

El balance general fue positivo, quedé conforme con mi desempeño y con el del auto. Obvio, con un montón de cosas por mejorar. Ahora me quedé medio manija, así que seguramente vaya a otro track day, así voy ganando experiencia. Lamentablemente para mi billetera, creo que esto será una adicción.

En cuanto al evento, imagino que no será nada fácil organizar un Track Day de tal magnitud: gran convocatoria de autos increíbles, de los cuales la mayoría giraron para el deleite del público. Me pareció muy buena la inclusión de las motos girando en pista, dieron gran espectáculo, sonoro y visual.

En cuanto al Fitito, más que conforme. Temiendo por la salud de mis cubiertas y siguiendo un buen consejo, llevé su presión a 43 adelante y 38 atrás, un verdadero carrito de rulemanes con menos grip que un skate. Si bien la adherencia no me ayudaba, traté de llevar el auto al límite y en mi mejor vuelta registre 1:55. Desde mi punto de vista, un valor más que aceptable comparado con los tiempos de otros autos que giraron y superaban en potencia a mi temible bólido.

Para futuros track days me animará a bajar la presión de las cubiertas para buscar mayor adherencia, asumiendo un cambio inmediato de neumáticos al momento de salir al autódromo.

En cuanto al manejo en circuitos, fue mi segunda experiencia, ya que años atrás en la presentación del Audi S4 di unas cinco vueltas al Número 5. Cuando ya estaba entendiendo cómo era la dinámica, me bajaron de un plumazo. Así que digamos que este fue mi debut. La sensación es increíble y la recomiendo a todo hombre de bien que se precie de tal.

Pegarle a ambos pianitos en los mixtos, después de la curva de la Confitería y agarrar el Curvón Ascari a fondo, a escasos 135 km/h en mi caso, son dos cosas que me gustaría estar repitiendo en este preciso momento. La cruda realidad llegaba en la recta principal, momento en el cual era superado cual Minardi en sus peores épocas, pero claro está: nada me quitaba la sonrisa de la cara.

J.P.M.

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El rutilante Fitito Sport de J.P.M. evoluciona sobre los legendarios boxes del Gálvez.

A fondo en la recta. La Bolita más pistera.

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EXPERIENCIA II "No tiene precio"



Por Lucas Maranca

1. Mail de Autoblog informando que era el ganador de la experiencia Premium Track Day.

2. Toda la semana esperando el día y organización familiar para asistir.

  1. Día D. Me levanto con una sonrisa, hago tiempo hasta salir para el Autódromo. Avenida General Paz lenta, para variar, pero al menos más de una Ferrari me entretuvo hasta llegar.

4. Ingreso por puerta 6, luego a Boxes. Box 5, precisamente.

5. Pregunto a la promotora (al nivel del evento) por los encargados , previo explicarle que había ganado el concurso y concentrarme en mirarla a la cara.

6. No menos de tres personas encargadas del evento se presentan, me muestran el auto, me presentan al piloto Leonel Bovalina (Turismo Pista), me preguntan si estoy listo para empezar y colocan las cámaras en el auto. Comienza la experiencia/sueño.

7. Me siento en la butaca, los nervios alegres me invadían al punto de no poder colocarme el cinturón de cinco puntos. Luego de recibir ayuda (no de la promotora), ajusté los tirantes del cinturón y una música hermosa al compás de miles de vueltas atraviesa el casco. Motor encendido, cruce de miradas con el piloto y pulgar arriba para salir a pista.

8. De ahí en más, todo alegría. Tres vueltas (dos sobrepasando un par de autos) disfrutando y aprendiendo un poco más de esta pasión que tenemos los lectores de Autoblog. El piloto siempre preguntándome con su mano si estaba todo OK y marcándome cada vuelta. Yo, con cuatro ojos aprovechando cada segundo y esperando que las vueltas fueran eternas. La experiencia incluyó tres sobrepasos, vibración en varios pianitos y todo tipo de sacudidas de cola que un traccion trasera y manos profesionales pueden lograr.

9. El peor momento, entrada a boxes, un motor que empieza a dejar de alegrar los oídos, punto muerto, sueño cumplido.

10. Resumen al estilo de Autoblog:
¿QUÉ ES?: Una gran experiencia para amantes de los fierros y la velocidad, recomendable 100% tanto por la gran organización como por la excelente predisposicion y profesionalismo del piloto.
MECÁNICA: No sé qué tenía el BMW bajo el capot, pero cumplió su cometido y sonaba hermoso.
LO MÁS: Todo. Desde el primer contacto con Autoblog y Premium Track Day, la excelente organización, el ambiente que se vivió, los autos americanos, la experiencia en sí, elpiloto, el grupo a cargo del evento, los autos, las motos, las Ferrari.
LO MENOS: Nada.
EL DETALLE: Faltó Carla Bunny.
PRECIO: Un cliché. No tiene precio. Para todo lo demás ... ¡concursos de Autoblog!

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VIDEO: Lucas Maranca en el BMW del Premium Track Day Experience

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