Por Carlos Sueldo
@charlysuelto
El anuncio de que la alianza entre Renault-Nissan y Mercedes-Benz fabricarán tres pick-ups en Córdoba basadas en la Frontier implica el desembarco del Rombo y la Estrella en un segmento donde hasta ahora no tenían presencia.
Pero, para Nissan, el salto local es aún más grande: la marca japonesa pasó de ser un simple importador a convertirse en una nueva terminal automotriz radicada en la Argentina.
“Hoy Nissan apuesta fuerte en Argentina y luego de mucho esfuerzo plantamos bandera, como nuevo miembro y productor de la industria automotriz en el país”, declaró el argentino José Luis Valls, CEO para Latinoamérica de Nissan.
Lo hizo en uno de los salones de reuniones del 5º piso del Hotel Hilton de Puerto Madero, luego de haber pasado por Casa de Gobierno para compartir una cadena nacional junto a la presidenta Cristina Fernández (lo que postergó por poco más de 90 minutos la hora de inicio señalada). La primera mandataria se mostró exultante con la noticia, y relató que minutos antes se había comunicado vía Skype con el CEO global de Nissan Motor Corporation, Carlos Ghosn.
Valls señaló que el desembarco local como productores de vehículos es el resultado de “mucho esfuerzo y trabajo de mucha gente”, y contó que la decisión de instalar la línea de producción en el mismo predio de Renault, en Santa Isabel, “no fue directa”, sino que se consideraron varias opciones para "levantar un green field totalmente separado".
“Tener producción desde Argentina resulta fundamental dentro del plan estratégico de expansión global”, enfatizó Valls, ya que “la región de Latinoamérica ha tomado una función fundamental en ese plan de crecimiento”. Antes, había repasado brevemente la “larga historia” de Nissan en el país, que arrancó a mediados de los ’80, “siempre en carácter de importadores, ya sea directos o bajo la mano de Renault Argentina”.
Como contraste, señaló: “Ahora vamos a ser nosotros mismos: Nissan Motor Corporation, (los que irán) manejando nuestros intereses y nuestro futuro en el país. Tuvimos que partir desde una hoja en blanco, con el objetivo de llevar nuestra marca al potencial que sabemos que tiene”.
“El año pasado comentábamos el plan de estar entre tres máximos jugadores de la región, pero para eso debíamos dar algunos pasos fundamentales. Uno de esos pasos era tener una plataforma industrial, para potencializar no solamente nuestra presencia en el país sino también nuestra capacidad de exportación”.
“Nadie en Latinoamérica puede pretender estar entre los grandes y ser uno de los jugadores clave de la región, si no tiene un pié en Argentina. Creo que a partir de hoy van a empezar a tomar bastante en serio cuando decimos que queremos estar entre los tres jugadores principales de la región”, remarcó.
El proyecto implica u$s 600 millones de inversión directa, que “Nissan va a traer al país”. de acuerdo a lo que señaló el ejecutivo. No está claro, en ese caso, cuáles serán los aportes de capital que harían los socios de la alianza, Renault y Mercedes-Benz; o si bien esto está comprendido dentro de esa cifra.
El proyecto generará mil empleos directos y 2000 indirectos. El primer producto de producción nacional será la NP 300 Frontier. “Somos referentes a nivel global en las pick up de una tonelada y será un honor entrar a competir cara a cara al mercado local, ahora como productores”, cerró Valls
A su turno, Thierry Koskas dijo estar muy satisfecho por haber logrado atraer el proyecto de producción de Nissan a la planta cordobesa, en el año de su 60 aniversario: “Demostramos que Renault tiene en Córdoba un gran conocimiento de los proveedores, el tema logístico, etc, lo que permitió a Nissan llegar a Argentina a un costo mucho menor”, explicó.
“Se trata de una victoria de la Alianza”, consideró. “Renault ayudó a Nissan a entrar a Argentina con este proyecto industrial y por otro lado, Nissan va a ayudar a Renault a entrar en un segmento en que no estábamos, que es el de las pick ups. Esto también es una gran novedad y sobre todo, una fortaleza de la alianza”, insistió.
“Vamos a aprovechar esto con una versión Renault de esta pick up, obviamente no la podemos mostrar todavía. Lo único que puedo decir es que, la pick up de Nissan es muy linda, pero no puedo encontrar palabras para describir la belleza de la pick up de Renault”, concluyó.
Thierry Koskas, presidente de Renault Argentina, y José Luis Valls, CEO de Nissan Latinoamérica.
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Nota del diario Ambito Financiero Un anuncio que debió esperar casi 10 años
Por Horacio Alonso
La decisión de Nissan de producir en la Argentina es un sueño postergado. Hace 10 años, la marca japonesa había comenzado a analizar la posibilidad de radicarse en el país con una estructura industrial y dejar de ser sólo importadora de vehículos.
Incluso, meses después, a mediados de 2006, las autoridades locales de entonces aseguraban que la decisión estaba tomada. Brindaban entrevistas para contar los detalles y se comenzaban a reunir con autopartistas para definir los proveedores.
Se hablaba, como finalmente se hará ahora, de producir en la planta que su aliada Renault tiene en Córdoba. Era la alternativa más lógica. Pero también se manejaban otras variantes como la provincia de Buenos Aires, por su proximidad a los puertos, como había hecho Toyota y como hizo Honda, en Zárate y Campana, respectivamente. En ese entonces, el modelo a fabricar en el país era el todoterreno X-Trail.
El proyecto tenía como objetivo principal abastecer al mercado brasileño, que se había convertido en pocos años en un gigante automotor. Pero todo quedó trunco en poco tiempo. La presión de ese país por llevarse la inversión, cuestiones cambiarias, la desconfianza que siempre genera la Argentina y otras rispideces abortaron el plan y el sueño tuvo que esperar.
Con el anuncio de ayer, Nissan se convertirá en la duodécima automotriz que produce en el país. Quedan pocas compañías que no tengan presencia fabril en la Argentina. De las más grandes, ninguna.
Pero hay otro dato que marca el perfil que el país va tomando en materia de producción automotriz: la Argentina se consolida como un polo industrial de pick-up.
Actualmente hay tres modelos que se fabrican localmente: La Toyota Hilux, la Volkswagen Amarok y la Ford Ranger. Con este triple anuncio, en el corto plazo serán seis lo modelos "made in Argentina".
Esto tendrá un beneficio para las marcas que decidieron apostar a este segmento, que es el que más crece en épocas de bonanza y el que menos cae en las crisis internas. La posibilidad de lograr escala para atraer a autopartistas es fundamental para mantener la competitividad, un problema que en la Argentina es cada vez más preocupante.