Se sabe: la Argentina es un país de ciclos. Así como en épocas de crisis expulsa y fomenta la emigración de muchos ciudadanos, cuando la mala golpea con más fuerza en el exterior, se produce una oleada a la inversa.

Son los llamados repatriados: argentinos que vivieron un tiempo en el exterior y muchas veces vuelven al país con souvenirs envidiables de sus estancias en otras tierras.

El secuestro de una Maseratri Quattroporte por parte de la AFIP a causa de la violación del régimen de repatriación de vehículos (ver nota), generó la semana pasada muchas consultas de los lectores de Autoblog.com.ar.

Encontrar una Maserati en la Argentina es toda una rareza. El único ejemplar de segunda mano que está publicado en este momento es una 3200 GT de 1999. Piden 68 mil dólares.

Y, teniendo en cuenta que una GranTurismo nueva no baja de 250 mil dólares, el caso que se comenta a continuación tiene una ecuación más que interesante.

Alejandro Armendano se ofreció a compartir su propia experiencia de repatriación con esta preciosa Maserati GranSport Coupé del 2006.

***

-¿Cuánto tiempo estuviste viviendo en el exterior y cuándo volviste a la Argentina?
-Viví en New York unos 12 años y volví hace exactamente dos meses y medio.

-¿Cómo te enteraste del sistema de repatriación para los autos y por qué elegiste esta Maserati?
-Trabajé siempre ligado al tema de importaciones y exportaciones. Eso hizo que tuviera siempre presente la posibilidad de traer un auto en caso de que decidiera emprender el regreso. Y la Maserati fue consecuencia de buscar un auto que me gustara. Había tenido la suerte de que la compañía para la que trabajaba me regalara un auto nuevo, Nissan Sentra, con el mantenimiento completo incluido. Esto hizo que cambiar o comprar un vehículo que satisfaga otras necesidades estuviera fuera de discusión. Sobre el Nissan no puedo decir más que cosas positivas, ya que jamás me dio problemas, nunca me dejó tirado y eso que al momento de venderlo ya tenia 180 mil kilómetros. Pero llegó el momento de renegociar mi contrato de trabajo y decidí optar por agregar este beneficio del auto -con el ajuste correspondiente- a mi salario. Y salí en busca de un auto para mí, elegido por mí. Quería algo que me permitiera tener otras sensaciones. Contemplé autos de diferente naturaleza. Una de las que más me había gustado era la Porsche Cayenne S, hasta que un día apareció una Maserati Coupé del 2002, que estaba dentro del presupuesto. Creo que al verla ya me impactó, sobre todo la calidad de las terminaciones. Se nota lo artesanal de la manufactura. Pero lo que me decidió por este auto fue el momento en que el propietario puso primera y salimos a probarla. No recordaba sentir nada igual. Había tenido la suerte de manejar autos de Mercedes, BMW e incluso Porsche, pero esto era diferente. No es el auto más potente, el más veloz ni tal vez sea el más lindo. Pero tiene algo que la hace muy especial. Es muy divertida manejarla y hace que te sientas conectado. Párrafo aparte para el sonido de ese tremendo motor hecho por Ferrari. A partir de ese momento, empecé a investigar el modelo y decidí buscar algo un poco más nuevo. Al mismo tiempo surgió la posibilidad de volver a la Argentina y ahí me volqué por esta GranSport 2006, que es una versión retocada de la Coupé y tiene algunos detalles mejorados: escape diseñado por la firma italiana Tubi, admisión nueva y suspensión electrónica. Más allá de estos detalles, algo que me parece único también en la Maserati es el equilibrio que existe entre lo deportivo, lo exótico y la elegancia. No hay muchas marcas que tengan ese balance. Y elegí la que ahora tengo en particular por el estado general y la combinación exterior-interior.

-¿Durante cuánto tiempo hay que ser propietario del auto en el exterior para poder repatriarlo a la Argentina?
-Tenés que tenerlo a nombre tuyo más de seis meses y no debe tener ninguna deuda pendiente, ya sea de prendas o multas.

-¿Cuánto tiempo demoró el trámite de repatriación, desde que iniciaste el papeleo hasta que retiraste la Maserati en Buenos Aires?
-El trámite arranca desde el momento de decidir viajar: en el consulado de origen, tenés que certificar el título del vehículo (ya sin deudas) y la factura de compra para evitar dolores de cabeza al momento de valorizar el auto en Aduana. Eso te lleva más o menos una semana. Un detalle no menos importante es que para poder "calificar" como mudanza particular, hay que justificar el haber vivido en el exterior más de dos años. Una vez arribado el auto a Buenos Aires, si actuás organizadamente y con rapidez, el trámite es relativamente corto. Mi auto llegó un sábado y el siguiente viernes estaba en la cochera de casa. Luego, agregale otras dos semanas para los trámites en la sección Aduana del Registro Automotor y el patentamiento final. Se patenta como si fuera 0KM y no necesita homologación, aunque el título de propiedad aclara que es un usado repatriado. La matrícula de origen se da de baja en el país de procedencia.

-¿Cuánto pagaste por el auto y cuánto te costó el trámite para tenerlo en la Argentina?
-La Maserati costó 45 mil dólares con los impuestos de allá incluidos y acá Aduana la tomó con un valor de 41 mil dólares. De acuerdo a ese valor, los impuestos a pagar sumaron 42.800 dólares.

-¿Podés vender el auto en la Argentina o tenés que conservarlo en tu poder durante algún tiempo?
-Esto va a depender bajo qué resolución lo ingreses al país. Para lo que son mudanzas particulares existen en este momento dos resoluciones en las cuales podes basarte. Si el vehículo que intentás traer tiene un valor menor a los 15 mil dólares (incluyendo el flete y seguro), podés ingresarlo haciendo uso de una nueva resolución de la AFIP, la 3109/11. En ese caso no paga impuestos, pero el auto debe quedar a tu nombre por el término de dos años. En el caso de que el valor del auto sobrepase este monto, la resolución por la que debés optar es la 1568/92 y en este caso hay que pagar los impuestos. Si te toca esta resolución es necesario tenerlo a tu nombre sólo por un año. Es importante aclarar que en ambos casos el único autorizado a manejar el vehículo es el titular. Por ende, no te dan cédulas azules durante estos períodos. Para observar que esto se cumpla, Aduana te comunica al momento de la liberación que durante este tiempo un inspector va a pasar para verificar que tengas el vehículo patentado con los papeles en orden y en el domicilio que declaraste al momento de ingresarlo. Si te mudás, tenés que informarlo en Aduana, ya que si el inspector no puede localizar el vehículo o al propietario te revocan el derecho y por ende te confiscan el auto.

-¿Y podés volver a irte en el país?
-Sí, podés volver a irte, pero tenés que cumplir con lo asumido ante Aduana, que es lo que te comenté antes.

-Si tuvieras que hacer el trámite otra vez, ¿qué cosas cambiarías o harías más fácil?
-Aduana es tan pero tan burocrática que asusta y puede llegar a estresarte fácilmente. Para facilitar las cosas, lo ideal sería que te dieran las resoluciones vigentes por escrito en el consulado de origen con los pasos a seguir.

-¿El trámite compensa el hecho de tener ahora una Maserati GranSport en la Argentina?
-Sí, sin dudas, más allá que desde el día que la subí al contenedor en New York hasta que finalmente pudo salir a la calle hayan pasado casi dos meses (tuve la mala suerte de que me tocó Semana Santa en el medio). En mi caso, creo que poder seguir disfrutando del auto vale el esfuerzo.

-¿Por qué hay tantos argentinos repatriando autos últimamente?
-Creo que uno de los motivos es la nueva resolución de AFIP que permite que traigas tu auto sin pagar impuestos (si estás dentro de los valores que mencioné antes). Cuando tomás la decisión de volver y empezás a mirar los valores de los autos acá en la Argentina, es una decisión casi automática de tomar. Es un importante señalar que se puede traer sólo un auto por adulto que vuelve a vivir al país. Un grupo familiar donde hay cuatro adultos, por ejemplo, puede repatriar cuatro autos.

***

Repatriación: cómo traer una Maserati a la Argentina por 80 mil dólares
Motor V8 atmosférico con 4.3 litros de cilindrada y 401 caballos de potencia.

Repatriación: cómo traer una Maserati a la Argentina por 80 mil dólares
La GranSport fue una las últimas evoluciones de la Maserati Coupé, antes de la llegada de la GranTurismo.

Fotos: Rodrigo Barcia

Enviá tu noticia a novedades@motor1.com