Desde París - Todavía con un halo de misterio, Renault de Brasil comenzó a enviar esta semana a algunos de sus clientes en ese país una serie de folletos que anticipan el lanzamiento del Fluence, el sedán compacto que se fabricará en Córdoba para toda la región. La noticia fue publicada en el blog brasileño Novidades Automotivas.
Su debut oficial será durante el Salón de San Pablo que se celebrará a fines de octubre. Las ventas en la Argentina están previstas que comiencen en noviembre.
Si bien se trata del modelo más importante producido en Santa Isabel en más de una década, el mercado brasileño será el principal destinatario de los envíos de este sedán, por eso la primicia es para los vecinos.
Durante el vuelo a París de anoche, Autoblog se encontró con un directivo de Renault Argentina, que viajaba también rumbo al salón francés.
Una intimidad: con nuestro orgullo herido, no pudimos más que felicitarlo por la habilidad de los pilotos de pruebas de la marca para ensayar el auto lejos del alcance de nuestros inquietos paparazzi.
De hecho, nuestros lectores pudieron capturar al Fluence en suelo argentino sólo una vez (ver nota y fotos), toda una rareza en comparación con las decenas de fotos que pudimos publicar de otros modelos de fabricación local, como el Chevrolet Agile, la Volkswagen Amarok y el Peugeot 408.
El directivo de Renault Argentina, asiduo lector de este blog, sonrió y explicó: “Es una simple cuestión de experiencia. Mientras algunas marcas inauguran sus centros de desarrollo local recién ahora, en Renault tenemos el nuestro desde hace varias décadas”, dijo mientras hojeaba el menú de a bordo que prometía tajine de petóncles et de crevettes para la cena.
Autoblog acotó:
-¿Qué tiene de desarrollo local este nuevo Renault?
-Muchísimo. El trabajo fue realmente intenso. Te prometo que vos y tus lectores de Autoblog se van a enterar antes que nadie del enorme trabajo que se hizo en Córdoba.
-Convengamos que el centro de desarrollo de Santa Isabel hacía tiempo que no se usaba.
-Es cierto, hacía tiempo que no lo usábamos con tanta intensidad como con este nuevo producto, pero hace 50 años que nuestros ingenieros saben dónde se puede probar un auto con discreción y dónde no. Un estacionamiento para periodistas tal vez no sea un buen lugar para probar un prototipo.